jueves, 20 de junio de 2013

Lo último de vos.

Tu nombre no me lo puedo sacar de la cabeza, recuerdo cada instante todo lo que compartimos, toda la confianza que depositaba en vos y se cae una lágrima lentamente por mi rostro.
Podría a ver continuado esta historia, pero acá termino del todo porque me rendí y no puedo amar a una amiga sufriendo, sinceramente te consideré como una hermana que me acompañó en mis peores momentos, en mis momentos más depresivos y es que vos lograste en aquel entonces hacerme sonreír con una simple tontería. Estabas ahí para mí, y ahora te fuiste.             
Jugaste a ser mi amiga, te creí absolutamente todo. 
Intento controlar mis sentimientos, intento no llorar más y de a poco lo voy logrando, pero no puedo dejar de ver todo lo que haces. Pude ver lo que eras realmente, tu traición la vengo sintiendo desde aquel día y no puedo quitarme de la cabeza esa frase que me partió el corazón. 
Ahora… ¿Qué paso con vos? No sos la misma que supuse que conocía.
Me despido de vos, no me queda otra opción, no me queda otro disfraz para ocultar.


Escribo en azul, porque lo único que verdaderamente sé de vos es que es tu color favorito. Si es que no me mentiste con esto también.

lunes, 10 de junio de 2013

Solo vete.

Te vi, no imagine que hablaríamos. Salimos, me caíste bien. Te conocí, me arrepentí de haberme acercado a vos. Me provocas daño, me haces sufrir y no entiendo como una persona que me saco miles de sonrisas ahora me saque lágrimas, pero hay un problema vos no tenes idea de la situación, de lo que estoy sintiendo dentro de mí. 
Mi debilidad hace que no pueda enfrentarme a nadie, ni conmigo misma. Proyecto cosas en los demás que son mias para no sentirme juzgada pero la equivocada soy yo.
Si me dieran a elegir entre vivir o morir, no sé que quiero. ¿ Cuan bajo puedo caer para no tener una respuesta a eso?